jueves, 2 de noviembre de 2006

El otoño

Pues sí, estoy seguro de que el frío no va a ser obstáculo para poder disfrutar del otoño. Mucho más teniendo en cuenta que las próximas tres semanas voy a estar en una ciudad ubicada un poco más al norte: Annecy (Francia). Pero ese es cuento aparte...
Lo cierto es que ayer fue un día festivo en Italia (el día de todos los Santos -y no de todos los muertos, como le dije a mi mamá-) y después de darme una pasada por la U, me fui a dar un paseíto por la ciudad y... que bonita que estaba!!!
Me di una vuelta por el Parque del Valentino, que está a la orilla del río Po y desde donde se aprecian muy bien las colinas que limitan la ciudad. Pues esta zona está llena de arboles... y el otoño sí que ha hecho su trabajo. No solo las hojas en el suelo, cuyo sonido al pisarlas siempre me ha gustado mucho, sino que los colores son sencillamente espectaculares. El contraste de la luz del atardecer, las luces artificiales que hay en los puentes que cruzan el río y en algunas edificaciones -y sus refeljos en le agua- y los colores marrones y ocres y amarillos y verdes (aun), formaban un paisaje precioso. Lo único malo fue no tener una camara a la mano, porque además también se presento una luna tremendamente bella, que complementaba genialmente el paisaje.
Seguramente el lugar al que voy también me ofrecerá paisajes como este y tal vez mejores, de manera que solo puedo disfrutar esta temporada, así sea bien fría.

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PD. Ya soy de nuelvo legal!!!

1 comentario:

Lou Goubreé dijo...

Eso sono muy europeo, a lo clásico.